Facebook Instagram Youtube Youtube Twitter Web Oficial de la Catedral de Sevilla Único Sitio Oficial

EL OSTENSORIO DEL CARDENAL SOLÍS, DE NUEVO EN USO DURANTE EL TRIDUO DE CARNAVAL

Hacía cuarenta y un año que el Ostensorio de San Juan Nepomuceno, no recuperaba su uso litúrgico. Con motivo del Triduo del Carnaval, esta pieza ha salido de las vitrinas del tesoro de la Catedral por segundo año consecutivo para la exposición del Santísimo durante las celebraciones eucarísticas de los días previos a la solemnidad principal del Miércoles de Ceniza. Recientemente se ha repuesto uno de los cristales del Viril por parte de la joyería El Oribe.

Este Ostensorio anónimo italiano del siglo XVIII, como otros  utilizados años anteriores en la Catedral de Sevilla, son piezas litúrgicas de gran significado y elaborados con esmero en siglos pasados y que adquieren una relevancia especial los días grandes de la Iglesia cuando se realza con la exhibición de estas obras de arte sacro.

Fue adquirido en Roma por el cardenal Francisco de Solís y Folch de Cardona (1713-1775), que fue obispo de Córdoba y de Sevilla, y debió ser realizado en un taller romano, según consta en una inscripción colocada en él, unos cinco años antes de que fuera adquirido por el cardenal Solís. Esta obra ingresó en el tesoro de la catedral de Sevilla en 1780, y también es conocida con el nombre de Ostensorio grande, aunque es mayormente conocido como ostensorio de San Juan Nepomuceno por la imagen de este santo colocada en el astil y por algunas escenas de su vida representadas en la base.

«La tradición y la belleza artística se entrelazan en estos ostensorios, que representan la devoción y la solemnidad de la fe cristiana. Su elaboración meticulosa y su uso en las ceremonias litúrgicas hacen de ellos elementos esenciales en la vida religiosa de la catedral» Santos Márquez, A. J. (2019)Buscar

COMPRAR
ENTRADAS